(CNN) — Mientras una tregua entre Israel y Hezbollah ofrece a los libaneses un respiro que necesitan desesperadamente, los palestinos de Gaza se sienten abandonados, a pesar de los renovados esfuerzos de Estados Unidos por poner fin a los combates en el enclave.
Durante casi un año, Hezbollah prometió no dejar de combatir a Israel hasta que aceptara un alto el fuego en Gaza. En septiembre, Israel intensificó su campaña contra el grupo militante libanés, dando muerte a sus altos mandos y lanzando una feroz operación aérea y terrestre en el sur del Líbano, que obligó a Hezbollah a abandonar sus condiciones para un alto el fuego.
«Gaza se queda sola. Hezbollah tiene sus propios cálculos para abandonar Gaza y preservar lo que quedaba de sus fuerzas… no nos beneficia», declaró Hatem Mohamed, de 47 años y residente en la ciudad de Gaza. «Este acuerdo permitirá a Israel centrarse sólo en los palestinos y en lo que queda de la causa palestina».
Las negociaciones para un alto el fuego en Gaza y la liberación de los rehenes israelíes llevan meses estancadas, ya que ambas partes se niegan a ceder en sus demandas.
Qatar, mediador clave en anteriores negociaciones de alto el fuego en Gaza, abandonó su papel este mes y cerró la oficina política de Hamas en la capital, Doha, tras llegar a la conclusión de que ambas partes ya no negociaban de buena fe. Turquía, que mantiene vínculos con Hamas, desmintió las informaciones según las cuales la oficina del grupo se había trasladado al país, pero afirmó que funcionarios de Hamas entran y salen del país con regularidad.
«No creo que un alto el fuego en Líbano haya cambiado mucho la dinámica de un alto el fuego en Gaza», dijo Tahani Mustafa, analista sénior de Palestina en International Crisis Group, un grupo de expertos con sede en Bruselas.
«Ambas partes tienen demandas que se excluyen mutuamente y no hay presión sobre Israel para que se reduzca y empiece a tomarse en serio la negociación. Israel quiere destruir a Hamas, mantener las tropas sobre el terreno y reasentarse potencialmente en el norte, lo que es inaceptable para Hamas», añadió. «Hamas quiere un cese total de las hostilidades, el regreso de la gente a sus hogares en el norte y ninguna presencia terrestre israelí… eso es completamente inaceptable para Israel».
Netanyahu «no está preparado» para poner fin a la guerra
A pesar de los contratiempos, los dirigentes israelíes y estadounidenses han señalado que la tregua del Líbano puede suponer una oportunidad para avanzar hacia un alto el fuego en Gaza.
La administración saliente de Biden sostiene que ahora podría haber «una nueva oportunidad» para impulsar un alto el fuego y un acuerdo sobre los rehenes en Gaza.
«Hamas está aislado. Hamas está ahora bajo presión, y todas las miradas, no sólo de Estados Unidos e Israel, sino del resto del mundo se van a volver hacia Hamas», declaró esta semana a CNN el asesor de Seguridad Nacional, Jake Sullivan.
El jueves, el primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, dijo que las condiciones para alcanzar un acuerdo que garantice la liberación de los rehenes israelíes de Gaza «han mejorado», pero mantuvo que no aceptará el fin de la guerra de Israel en el enclave, ya que Hamas aún no ha sido desmantelada.
«(Estoy) dispuesto a un alto el fuego en cualquier momento. Pero el fin de la guerra, no estoy listo para eso, porque también tenemos que lograr la eliminación de Hamas», dijo.
El presidente Joe Biden dijo el martes que Estados Unidos «hará otro esfuerzo» con Turquía, Egipto, Qatar, Israel y otros países para lograr un alto el fuego en Gaza, liberar a los rehenes y «poner fin a la guerra sin Hamas en el poder». El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, dijo el miércoles en el Parlamento que su país estaba dispuesto a contribuir de «cualquier forma posible». El miércoles, el primer ministro de Qatar, Mohamed bin Abdulrahman Al Thani, y el presidente de Egipto, Abdel Fattah Al Sisi, se reunieron en El Cairo para discutir los esfuerzos de alto el fuego.
Hamas dijo el miércoles que se compromete a cooperar con «cualquier esfuerzo» para lograr un alto el fuego en Gaza tras la tregua alcanzada en Líbano, pero reiteró su exigencia de la retirada completa de Israel de Gaza, la liberación de los presos palestinos y el regreso de los gazatíes a sus hogares.
Más de 250 personas fueron tomadas como rehenes y unas 1.200 murieron durante los ataques de Hamas contra Israel el 7 de octubre de 2023. Al mes siguiente, más de 100 rehenes fueron liberados en el marco de un efímero acuerdo de alto el fuego y toma de rehenes. Desde entonces, las fuerzas israelíes han rescatado a un puñado de rehenes. De los 101 rehenes que se cree que siguen retenidos en Gaza, al menos 34 están muertos.
Jihad Abu Yasser, panadero de 26 años que vive en el norte de Gaza, calificó de «fracaso» la táctica negociadora de Hamas y afirmó que los rehenes por sí solos ya no eran suficiente peso en las conversaciones con los israelíes.
«Seguimos empecinados hasta que murió la mitad de los rehenes, y estamos negociando con una carta perdida… Tenemos quizá menos de 70 rehenes vivos. Si la guerra continúa y seguimos dando largas, y los israelíes también, los rehenes morirán, que es nuestro peso», dijo, añadiendo que la mayoría de los gazatíes piensan lo mismo. «Todos dicen: ¿sobre qué estamos negociando?».
«La gente dice que si Hezbollah terminó (su guerra) entonces, si Dios quiere, estamos cerca (en Gaza)… Son mentiras», dijo Abu Yasser. «Por el amor de Dios, paren, paren, paren (la guerra)».
–Dana Karni y Gul Tuysuz, de CNN, contribuyeron a este reportaje.
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